Corrían los últimos días de 1965. El año había sido totalmente anodino. El pueblo dormitaba en el aburrimiento. El panorama se presentaba desesperanzador. Nada hacía pensar que algo fuera a cambiar. De pronto, ocurrió. El 1 de enero, Manolo asomó la cabeza a este mundo. Y ya nada volvió a ser igual. Comenzaba la historia de una quinta destinada a dejar huella. Una historia que dura ya medio siglo… y lo que le queda. Nuestra historia.
lunes, 28 de marzo de 2016
Gorgoritos angelicales
Procedentes de una ya lejana Navidad, suenan desde hoy aquí estos gorgoritos angelicales -unos más que otros, todo hay que decirlo-, con el sabor de las grabaciones manuales del pasado, toses y susurros incluidos. Y hasta alguna que otra interrupción y bronca de don Pedro Lozano, el paciente director de aquel coro primerizo que, tras dos memorables actuaciones en Torrenueva y la Residencia de las Hermanitas de los Pobres de Valdepeñas, nunca volvió a reunirse.
A la espera del desfile de biquinis y slips ajustados que anuncien el verano, disfrutemos de Los niño(a)s del coro.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario